El tema central de nuestro proyecto, es aprovechar la energía solar que se irradia en Bogotá, con el fin de focalizar esta, en energía eléctrica, a razón de buscar nuevas fuentes energéticas que alimenten nuestra ciudad.
El proyecto es abordado desde el implemento de energía fotovoltaica, que pueda dar una opción más viable a todos los problemas que se viven en la actualidad sobre el calentamiento global y este Workshop se encontraba dirigido hacia esa posibilidad.
Se plantean las zorras, como canales acumuladores de energía, que permiten almacenar e intercambiar esta para distintos tipos de funciones que contribuyan al ciclo energético de la ciudad. Básicamente el proyecto consistió en la adaptación de paneles solares a uno de los objetos icónicos de Bogotá “Los Zorreros”. De esta forma, el uso de paneles fotovoltaicos plegables permitiría al Zorrero almacenar la energía captada en baterías y poder hacer uso de ella en sus lugares de residencia y en sus lugares de trabajo.
En conclusión, se genera un sistema energético de carácter dinámico. Este se compone al desarrollar 3 elementos:
Primero una cartografía que resulta de la superposición de otras dos que son, el análisis de las áreas con mayor exposición solar de la ciudad (asoleación) y las tensiones generadas por los recorridos predominantes de las zorras.
La cartografía de asoleación está basada en diagramas de iluminación y brillo solar dados por el IDEAM, esto demuestra los puntos con mayor influencia solar sobre la capital. Se analiza que la mayor retención de sol la captan, las zonas planas a las afueras de la ciudad y a medida que el sol hace el recorrido el brillo es constante y totalmente perpendicular a la superficie, pero varía en intensidad al mirar las zonas centro, por las diferentes divisiones urbanísticas que tiene la ciudad y los tipos de arborización. Existe un brillo solar, en las grandes vías, todo esto por la paramentación y su magnitud, no obstante las alturas de los diferentes sectores gradúan la luz.
La cartografía de tensiones muestra por medio de diferentes colores los sitios o puntos de partida de los zorreros en la ciudad. El color varía dependiendo del nivel de tensión y la cantidad de estos individuos en su zona inicial de sus recorridos cotidianos. A su vez, se puede observar que cada uno de estos realiza un recorrido, que está estructurado por algunas arterias viales de la ciudad, en algunos casos estos fragmentan el recorrido dependiendo del tipo de material que quieren adquirir creando cruces o choques en la cartografía.
El resultado de la superposición de las anteriores cartografías, muestra los recorridos por los cuales los zorreros deben pasar para poder tener un mayor aprovechamiento del tiempo y una mejor captación de energía solar y materiales de reciclables. En esta cartografía es importante el diseño de las rutas, pues todas pretenden confluir en un punto de alta captación solar, planteado como un edificio que permite ubicar las zorras.
En segundo lugar, nuestra propuesta concerniente a la zorra, consiste en la implementación de una cubierta estructurada en madera sobre la cual se dispondrán de manera modulada 4 paneles fotovoltaicos plegables. Estos, no sólo recolectan energía y protegen, sino que también son portables y se pueden retirar, permitiendo múltiples usos como se explican en la tercera propuesta.
Finalmente, como tercera propuesta, se plantea un edificio energético de parqueaderos para la ubicación de las zorras, funcionando dentro del sistema energético.
El edificio se compone de un gran elevador y una serie de cubículos dispuestos en los cuales los zorreros pueden llegar, dar descanso a sus caballos y organizar sus cosas producto de la recolección. La cubierta de la zorra está modulada para que esta “tela” cubra la fachada del cubículo otorgando privacidad y al mismo tiempo recoja la radiación que le da a la fachada del edificio. La intención estética de esto es generar hacia el exterior, un juego en la fachada que es cambiante. La fachada en vidrio del edificio permite la exposición del interior, así mismo se puede ver hacia afuera la disposición de los cubículos.
El planteamiento pretende generar una fomentación en los procesos de reciclaje. Hoy en día hay 6000 zorreros asociados con cooperativas de reciclaje, mientras que 14000 trabajan como independientes, por lo tanto es necesario generar una conciencia urbana, que reconozca la labor social con la que cumplen los zorreros en Bogotá. De tal forma se les ofrecen mejores condiciones de vida y se están generando mejoras en los procesos de reciclaje que benefician a toda la ciudad, incluso se genera una afectación positiva a nivel global.
Es muy interesante la idea de trabajar con el medio ambiente y a la vez tomar conciencia de una problemática tan grande, como lo es la escasez de energía y el desabastecimiento de recursos fósiles en el planeta. Esto consiste en proponer ideas para restablecer los medios energéticos del planeta y centrarlos hacia funciones útiles que alimenten proyectos innovadores.
El proyecto es abordado desde el implemento de energía fotovoltaica, que pueda dar una opción más viable a todos los problemas que se viven en la actualidad sobre el calentamiento global y este Workshop se encontraba dirigido hacia esa posibilidad.
Se plantean las zorras, como canales acumuladores de energía, que permiten almacenar e intercambiar esta para distintos tipos de funciones que contribuyan al ciclo energético de la ciudad. Básicamente el proyecto consistió en la adaptación de paneles solares a uno de los objetos icónicos de Bogotá “Los Zorreros”. De esta forma, el uso de paneles fotovoltaicos plegables permitiría al Zorrero almacenar la energía captada en baterías y poder hacer uso de ella en sus lugares de residencia y en sus lugares de trabajo.
En conclusión, se genera un sistema energético de carácter dinámico. Este se compone al desarrollar 3 elementos:
Primero una cartografía que resulta de la superposición de otras dos que son, el análisis de las áreas con mayor exposición solar de la ciudad (asoleación) y las tensiones generadas por los recorridos predominantes de las zorras.
La cartografía de asoleación está basada en diagramas de iluminación y brillo solar dados por el IDEAM, esto demuestra los puntos con mayor influencia solar sobre la capital. Se analiza que la mayor retención de sol la captan, las zonas planas a las afueras de la ciudad y a medida que el sol hace el recorrido el brillo es constante y totalmente perpendicular a la superficie, pero varía en intensidad al mirar las zonas centro, por las diferentes divisiones urbanísticas que tiene la ciudad y los tipos de arborización. Existe un brillo solar, en las grandes vías, todo esto por la paramentación y su magnitud, no obstante las alturas de los diferentes sectores gradúan la luz.
La cartografía de tensiones muestra por medio de diferentes colores los sitios o puntos de partida de los zorreros en la ciudad. El color varía dependiendo del nivel de tensión y la cantidad de estos individuos en su zona inicial de sus recorridos cotidianos. A su vez, se puede observar que cada uno de estos realiza un recorrido, que está estructurado por algunas arterias viales de la ciudad, en algunos casos estos fragmentan el recorrido dependiendo del tipo de material que quieren adquirir creando cruces o choques en la cartografía.
El resultado de la superposición de las anteriores cartografías, muestra los recorridos por los cuales los zorreros deben pasar para poder tener un mayor aprovechamiento del tiempo y una mejor captación de energía solar y materiales de reciclables. En esta cartografía es importante el diseño de las rutas, pues todas pretenden confluir en un punto de alta captación solar, planteado como un edificio que permite ubicar las zorras.
En segundo lugar, nuestra propuesta concerniente a la zorra, consiste en la implementación de una cubierta estructurada en madera sobre la cual se dispondrán de manera modulada 4 paneles fotovoltaicos plegables. Estos, no sólo recolectan energía y protegen, sino que también son portables y se pueden retirar, permitiendo múltiples usos como se explican en la tercera propuesta.
Finalmente, como tercera propuesta, se plantea un edificio energético de parqueaderos para la ubicación de las zorras, funcionando dentro del sistema energético.
El edificio se compone de un gran elevador y una serie de cubículos dispuestos en los cuales los zorreros pueden llegar, dar descanso a sus caballos y organizar sus cosas producto de la recolección. La cubierta de la zorra está modulada para que esta “tela” cubra la fachada del cubículo otorgando privacidad y al mismo tiempo recoja la radiación que le da a la fachada del edificio. La intención estética de esto es generar hacia el exterior, un juego en la fachada que es cambiante. La fachada en vidrio del edificio permite la exposición del interior, así mismo se puede ver hacia afuera la disposición de los cubículos.
El planteamiento pretende generar una fomentación en los procesos de reciclaje. Hoy en día hay 6000 zorreros asociados con cooperativas de reciclaje, mientras que 14000 trabajan como independientes, por lo tanto es necesario generar una conciencia urbana, que reconozca la labor social con la que cumplen los zorreros en Bogotá. De tal forma se les ofrecen mejores condiciones de vida y se están generando mejoras en los procesos de reciclaje que benefician a toda la ciudad, incluso se genera una afectación positiva a nivel global.
Es muy interesante la idea de trabajar con el medio ambiente y a la vez tomar conciencia de una problemática tan grande, como lo es la escasez de energía y el desabastecimiento de recursos fósiles en el planeta. Esto consiste en proponer ideas para restablecer los medios energéticos del planeta y centrarlos hacia funciones útiles que alimenten proyectos innovadores.
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